La seguridad energética en el punto de mira de la geopolítica.

Los Estados enfocan varias de sus acciones en garantizar un suministro de energı́a de forma sostenible medioambiental y económicamente, y esto es lo que se conoce como seguridad energética y se realiza a través de la generación de energía por parte de fuentes autó ctonas, y en numerosas ocasiones, a través del abastecimiento exterior. En los últimos años, en el plano europeo se ha visto cómo la capacidad de garantizar esta seguridad ha sido mermada por la injerencia de actores extranjeros, como ocurrió en 2022 con el sabotaje del Nord Stream.

Cuando decimos que la seguridad energética es concebida como las acciones de los Estados capaces de garantizar un suministro, no debemos olvidar las instalaciones energéticas esenciales, tan importantes en suelo europeo. Las instalaciones y redes de generación y distribución de electricidad, ası́ como las necesarias para el almacenaje y el transporte de energía , hoy en día, están todas conectadas por la conFluencia de dos redes: la eléctrica e Internet. En las sociedades modernas, la industrialización depende en su mayor parte del desarrollo de Internet, lo que también provoca vulnerabilidad y un riesgo potencial de recibir un ciberataque en algún centro de control industrial.

La ciberdelincuencia: desafíos de seguridad en las infraestructuras energéticas.

Según un informe publicado por Threat Landscape Report desde enero de 2022 hasta hoy, se han producido, al menos, 43 ataques de ransomware contra empresas que trabajan en el sector energético europeo. El principal objetivo de los ciberatacantes es destruir las infraestructuras básicas de las que disponemos en Europa para poder almacenar y transportar energı́a. Y es aquı́ donde entra la geopolıt́ ica de lleno.

Detrás de los grupos de ciberdelincuentes suelen estar los Estados que, como Rusia y China, a base de motivos geopolı́ticos e intereses comerciales, apoyan a estos grupos para atacar a sus enemigos occidentales menoscabando sus reservas energéticas. La OTAN y la Unión Europea está n cooperando para proteger las infraestructuras más crı́ticas con el objetivo de mitigar las posibles debilidades.

Energías renovables: la geopolítica y la resiliencia europea en la transición energética.

El continente europeo tiene que anticiparse a que su seguridad energética esté en riesgo y sea el objetivo de ataque de otros Estados, y un argumento a nuestro favor es el uso de las energı́as renovables. Si los paıś es de Europa, y de occidente en general, redujeran su dependencia de los combustibles fósiles, además de reducir la subordinación con proveedores que a menudo son polı́ticamente inestables, también se aminorará el impacto medioambiental que causan. Se prevé que España sea uno de los paı́ses que se vea más beneFiciado de la transición energética debido a su elevado potencial renovable. De hecho, el GeGaLo Index lo sitú a en el puesto 38 de 156 paıś es en función de su dependencia de producción de fósiles y sus reservas.

A medida que la Unión Europea intenta impulsar su resiliencia geopolı́tica, se corre un riesgo, que es la de sustituir la dependencia de combustibles fósiles por la de materias primas esenciales para la consecución de energía s renovables.

Actualmente, el 50% de esas materias se encuentran en Estados frágiles o regiones políticamente inestables. Hoy en dıá , China proporciona el 62% del suministro de estas materias a la Unión Europea, lo que provoca que, debido a la baja sustituibilidad de muchas materias primas esenciales, se incremente el riesgo de que el suministro se vea interrumpido.

Por todo ello, con el auge de las energı́as renovables, los Estados tendrán que reconsiderar sus estrategias energéticas, examinando cómo la seguridad energética se verá afectada por los esfuerzos para lograr un sector energético más ecológico y menos dependiente de otros Estados. Por tanto, el acceso y el suministro estable de estas materias primas esenciales son condiciones previas para que cualquier nueva energı́a entre al mercado y pueda implementarse correctamente.

Como respalda Overland, el aumento de las energı́as renovables conducirá a una nueva era de pensamiento geopolı́tico, ya que las energı́as renovables cambian la posición de poder de los Estados en el sistema internacional. Las relaciones entre paı́ses serán más próximas cuando pasen a ser mutuamente dependientes, debido a que en los intercambios comerciales será necesario equilibrar las redes energéticas que emplean materias primas esenciales, como el cobre, contra la discontinuidad solar y eó lica.

Sin duda, el futuro es el avance hacia las metas de energı́a sostenible que se recogen en el Objetivo 7 de la Agenda 2030, logrando un acceso universal a la electricidad limpia. Para ello, se necesita que todos los Estados colaboren invirtiendo en infraestructuras y nuevas tecnologı́as para que las energı́as renovables puedan llegar a todos los lugares del planeta.